sábado, 20 de diciembre de 2014

A pesar de todo, un Sí cristiano en favor del encuentro


Contra toda ingenuidad y profecías del desastre, la caída de otro muro de Berlín en nuestro continente americano será una buena noticia 

El súbito acercamiento entre Cuba y Estados Unidos es una buena noticia, aunque las razones no se conozcan del todo
 Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios. Mateo 5:9 (BJ)

Castro y Obama dialogan acerca del fin de las tensiones entre Cuba y Estados Unidos. El Papa Francisco y el gobierno canadiense sirvieron de mediadores. La ingenuidad que comúnmente nos caracteriza como discípulos del Señor (Lucas 16:8), nos impide concebir las agendas ocultas de los mandatarios. ¿Una cortina de humo para los Castro? Están latentes la embestida de organismos de derechos humanos, y las justas reclamaciones de millones de cubanos ante una revolución costosa en términos sociales. ¿Una jugada internacional para Obama? Su bajo índice de popularidad (incluso entre los demócratas), la mala sintonía que tienen los Estados Unidos en Latinoamérica y la necesidad de sacudirse del ascenso mundial de China en la economía mundial, requieren una “bala política de oxígeno”. No se debe desestimar tampoco la importancia que implica para el Vaticano anotarse otro triunfo en la política mundial.

Barack Obama. Foto: Casa Blanca - Dominio Público / Papa Francisco. Foto: ACI Prensa / Raúl Castro. Foto: Gobierno de Rusia (CC BY 3.0)
Las evidentes ventajas obtenidas por cada líder en este proceso de acercamiento, no pueden ocultar que de todos modos hay horizontes prometedores para quienes sufren en la Isla de Cuba
Pero por encima de odios y desconfianzas ideológicas, es un deber moral de la humanidad procurar la paz y la convivencia. Para los seguidores de Jesucristo, lo es más. En las páginas vivas de Su Evangelio, Jesús nos alienta promover la paz, aunque su paz nos desborde siempre (Mateo 5:9; Juan 14:27). Por eso debemos celebrar cada oportunidad histórica en que líderes de dos bandos en conflicto se puedan sentar para encontrar salidas distintas al enfrentamiento. Detrás de cada acción bélica o del desconocimiento del otro, son los más pobres y excluidos quienes padecen las consecuencias más trágicas. Es algo que desconocemos frecuentemente. Pero son ellos, paradójicamente quienes están más cerca del corazón de Dios en toda situación donde hay sufrimiento (Jeremías 20:13).

Quienes atizan la guerra y las exclusiones se olvidan que las víctimas son siempre los más pobres, los preferidos de Dios

Por ese motivo, causa desconcierto y hasta pánico que ciertos dirigentes religiosos y algunos sectores en las congregaciones, vean la confrontación bélica como una meta. Algunos desorientados desean más guerra supuestamente para acelerar el regreso de Cristo. No es coincidencia que determinados sectores republicanos en Norteamérica, los “Teoconservadores”, sean quizás los primeros en oponerse a las concesiones hacia Cuba. No les faltarán motivos para su odio religioso, al saber que el Papa Francisco tuvo mucho que ver en la mediación entre los dos países. Tampoco sorprende que cubanos acomodados en Florida u otros lugares de América se sientan molestos con un probable fin del bloqueo. Pareciera que a los ultraderechistas evangélicos y a los prósperos inmigrantes se les hubiera olvidado de dónde vinieron, y a qué sabe la pobreza. ¿Suena familiar con los apóstoles de la teología de la prosperidad de hoy? Ese es un tema para otra ocasión.

Existen sectores en congregaciones religiosas de distinta filiación que ven la guerra como un ideal ¿Olvidan estos el mensaje central del Evangelio?

Bienvenida la paz, siempre optimizable, siempre en proceso de mejorarse. No hay que olvidar que el shalom (שָׁלוֹם), la paz de Dios, es mucho más que simplemente acallar las armas. Es la cercanía de Dios evidenciada en la plenitud del ser humano en todas sus dimensiones. Es algo maravilloso y utópico, porque será necesario esforzarnos más cada día por lograrla, aunque nunca alcancemos a obtenerla del todo. Lejos de nosotros, como seguidores de Jesucristo y lectores de la Biblia, atizar las venganzas, las discriminaciones, la ruptura de los diálogos y los enfrentamientos sin fin. Esté siempre cerca Señor tu Palabra y tu Espíritu que nos prodigan constantemente que Nuestro Dios es Paz (Jueces 6:23).

El término hebreo Shalom representa mucho más que cese de conflictos, dirigiendo nuestra mirada hacia la plenitud de Dios en todas las dimensiones de nuestra existencia

Lic. Nelson Lavado
Comunidades Bíblicas Lectoras
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Para saber más

Aciprensa. Papa Francisco y el histórico restablecimiento de relaciones Cuba - Estados Unidos. https://www.aciprensa.com/noticias/papa-francisco-y-el-historico-restablecimiento-de-relaciones-cuba-estados-unidos-75410/
Brown, F., Driver, S. R., Briggs, C. A. Enhanced Brown-Driver-Briggs Hebrew and English Lexicon. Strong's, TWOT, and GK references. Oak Harbor: Logos Research Systems, 2000.
El País. Cuba y Estados Unidos: ¿un milagro de San Lázaro? http://internacional.elpais.com/internacional/2014/12/18/actualidad/1418931251_728196.html. Consultado el 20 de Diciembre de 2014.
El Mundo. DIPLOMACIA Tras la liberación del estadounidense Alan Gross Estados Unidos y Cuba retoman sus relaciones económicas y políticas. http://www.elmundo.es/internacional/2014/12/17/54919a1aca47410a458b4581.html Consultado el 20 de Diciembre de 2014.
El País. Nueva era entre dos históricos adversarios. http://internacional.elpais.com/internacional/2014/12/17/actualidad/1418825186_663350.html. Consultado el 20 de Diciembre de 2014
Lockward, A. Nuevo Diccionario de la Biblia. Miami: Editorial Unilit, 2003.
Wikipedia. Partido Republicano en Estados Unidos. http://es.wikipedia.org/wiki/Partido_Republicano_%28Estados_Unidos%29. Consultado el 20 de Diciembre de 2014.

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